Esta especialidad se ocupa del diagnóstico y tratamiento de las enfermedades cuyo tratamiento requiere generalmente la realización de una intervención quirúrgica, y cuyo origen sea benigno, traumático o relacionadas con un cáncer. Su campo de intervención abarca el aparato digestivo, pared abdominal, mama, piel, sistema endocrino, afecciones externas de cabeza y cuello, entre otras.